La buena preparación y el impecable cuidado y mantenimiento del viñedo por parte de los viticultores de la Denominación de Origen Ribera del Duero han sido clave para conseguir una calidad suprema en las uvas que acabamos de introducir en nuestras bodegas. El resultado de la totalidad de kilos de uva recogidos en esta zona ya se ha dado a conocer por parte del Consejo Regulador y han sido un total de 96 millones de kilogramos con un excelente estado y calidad.
Ahora es tiempo de elaboración, de espera y de el saber estar de nuestros enólogos para unos vinos que se presentan frescos y elegantes, con una nariz muy expresiva y gran equilibrio en boca destacando especialmente lo aterciopelado de sus taninos. ¡Ganas de probar el resultado!